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Trauma

La serie, lo serio

Huellas del Trauma

Trauma y pulsión[1]
Norma Sierra

“(…) la inmersión en el lenguaje es traumática porque comporta en su centro una no-relación. La no-relación sexual no es jamás escrita. Es lo que hace que Lacan haya podido decir que el traumatismo es en última instancia el trauma sexual.”[2]

La irrupción traumática del goce implica la efracción primera del trauma fundante del parlêtre, como sus réplicas, que “no cesan de alterar las distintas homeostasis o estabilizaciones que el sujeto ha podido establecer como defensas contra la efracción repentina de un goce desconocido para él”[3].

En su lectura del trauma freudiano Lacan apunta al exceso de goce movilizado por el acontecimiento traumático, que “fija una modalidad de satisfacción de la pulsión que no es del orden del placer”[4].

Trauma y pulsión se articulan en la composición de lo traumático, por la “(…) afinidad esencial de toda pulsión con la zona de la muerte”[5].

Lacan concilia las dos caras de la pulsión, vida y muerte, en una misma raíz. El efecto de pérdida real en el viviente por estar sujeto al sexo, tiene la misma raíz que la constitución de la pulsión como fuerza constante que alcanza su satisfacción no en los objetos como lo hace el instinto, sino en su recorrido, abierto por el borde pulsional trazado cuando los orificios corporales se vinculan “con la apertura-cierre de la hiancia del inconsciente”[6]. Por este encuentro traumático, el ser viviente será inducido a su realización sexual por el señuelo.

La satisfacción pulsional está en sus recorridos, sus destinos, en los retornos por efecto de la represión que redoblan el goce sacrificial del superyó, por lo cual Lacan señaló que la pulsión siempre se satisface.

En el Seminairo 11 la transferencia es conceptualizada como la puesta en acto de la realidad sexual del inconsciente, “fantasma ligado a pulsiones sexuales”[7]. Al permitir la transferencia que el deseo del analista opere sobre ellas, es posible otro destino de la satisfacción pulsional, que conduce a Lacan, en el mismo seminario, a preguntarse ¿cómo se vive la pulsión una vez atravesado el fantasma fundamental?

NOTAS

  1. Cartel: “Clínica del trauma”. Cartelizantes: Amaya Estela, Anzorena Mariana, Finos Marcela, Lucero Patricia. Más Uno: Norma Sierra
  2. Laurent, E., “El revés del trauma”, Virtualia N° 6 http://www.revistavirtualia.com/articulos/696/destacados/el-reves-del-trauma
  3. Laurent, E., Disrupción del goce en las locuras bajo transferencia., Conferencia inaugural XI Congreso de la AMP, 2018.
  4. Mandil, R., Psicoanálisis en tiempo real, p. 55, Seminario Internacional del CIEC, Córdoba: Colección Grulla, 2019.
  5. Lacan, J., El seminario, Libro 11, Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis, p. 207, Bs. As.: Paidós, 1981.
  6. Ídem 4.
  7. Aramburu, J. (2000). “El deseo del analista y la pulsión”, en El deseo del analista, p. 89. Tres Haches, Buenos Aires.